El les dijo: Jehová es testigo contra vosotros, y su ungido también es testigo en este día, que no habéis hallado cosa alguna en mi mano. Y ellos respondieron: Así es. 1 Samuel 12: 1-5
Existe un dicho popular d"ominicano que reza de la siguiente manera: "Crea fama y acuéstate a dormir", aludiendo al cuidado que se debe tener a la hora de manejarse en público. Tomando como referencia la sabiduría urbana, el descanso al dormir, dependerá de la fama que se haya tenido.
El pueblo de Israel tomo la decisión de tener un rey como las demás naciones. Esto había generado el rechazo de Samuel, líder del pueblo, porque entendía que el pueblo ya no lo quería a él. Pero eso no era así, porque el pueblo realmente estaba rechazando a Dios. A raíz de esto Samuel confronta al pueblo y les pregunta sobre como ha sido su comportamiento ante ellos y estos le confirmaron, que había sido intachable.
Esta experiencia de Samuel en su ejercicio como sacerdote, nos puede conducir a la pregunta siguiente, ¿Qué fama hemos creado? ¿Si nos sometemos al escrutinio de la sociedad, de nuestro entorno, cuál sería el resultado?
Aprendí de mis padres sobre la importancia de apegarse a los principios de la fe. Porque estos garantizan que se pueda tener una buena fama, y dormir tranquilo.
Apegarse significa, seguir las directrices descritas en Su Palabra al pie de la letra. Manteniendo una actitud de evaluación constante ante los comportamientos diarios, con el fin de cumplir con cada una de ellas. De manera que podamos someter nuestra manera de manejarnos ante Dios y la sociedad y salir airosos.